Consciente de que el lanzamiento de la versión 10.0 de Suse había sido un tanto precipitada esperaba como agua de mayo la salida de la versión 10.1 en la que, estaba seguro, solucionarían un problema tan evidente (y era un apoyo importante saber que no estaba sólo). Craso error. En la versión 10.1 me encuentro con que los cambios en YAST2 son insignificantes y, para colmo, la instalación por defecto te coloca un nuevo elemento, ZMD, Zenworks Management Daemon, que es tan poco práctico como YAST2 y que, además, se da de tortas con el. Terrible.
La verdad es que he tenido muy poco tiempo libre en el último mes y no he podido buscar una solución para que YAST2 y ZMD funcionen correctamente (si es que la hay) pero, en cualquier caso, es inadmisible que una distribución que quiera llegar al escritorio del gran público no instale de forma correcta un gestor de paquetes que permita actualizar el sistema de forma cómoda y sin errores. Además, estoy convencido de que no ha sido problema de mi instalación porque he hecho dos distintas (una instalación desde cero en arquitectura de 64 bits en casa y una migración desde la versión 10.0 en el trabajo) y en ambas se reproducen los mismos problemas. Por otro lado, aparece entre los bugs reconocidos de la versión 10.1 final y si echamos un vistazo a los grupos de noticias de la distribución en inglés y castellano vemos que el problema es bastante popular…
Buscando soluciones rápidas valoré usar de nuevo apt2rpm. Lo he probado con anterioridad y no me acaba de hacer gracia del todo. Es muy bueno para instalar paquetes y si, como es mi caso, estás familiarizado con apt-get (siempre uso Debian en los servidores que instalo) mejor que mejor, pero a veces, al menos con Suse, se arman unos conflictos de dependencias bárbaros. Las otras dos opciones eran Klik y Smart, así que le estuve echando un vistazo a las webs de ambas herramientas y, rapidamente, me di cuenta de que smart era lo que estaba buscando. Además funciona de miedo.
Smart nace, segun dicen, con la idea de ser un gestor de paquetes universal que trabaje con la mayoría de las grandes distribuciones mejorando sus sistemas nativos. Ya de entrada tiene soporte en línea de comandos con una sintaxis casi calcada de la de apt-get, soporta casi todos los tipos de repositorios de paquetes posibles y por lo que he podido comprobar (y ellos aseguran) maneja muy, muy bien los conflictos de dependencias.
La interfaz gráfica es, además, muy buena. En el primer arranque te autodetecta y sugiere algunos de los principales canales de paquetes para tú distribución. La actualización de los mismos se hace en paralelo y de forma sorprendentemente rápida porque la herramienta lleva control de los mirrors de cada repositorio (y quien ha trabajado con los repositorios de Suse habitualmente sabrá valorar esto mucho). A continuación unos pantallazos del proceso de todo esto y de mi primer upgrade que incluía ya los paquetes de KDE 5.3
Como se aprecia en el último de los pantallazos anteriores la descarga de paquetes se hace en paralelo de forma verdaderamente eficiente. Además, he podido comprobar como descarta los mirrors sin conectividad ‘saltando’ a uno correcto en escasos segundos. La búsqueda de paquetes por nombre para su instalación y/o desinstalación es también muy cómoda e intuitiva:
Voy a tocar madera porque, a fin de cuentas, llevo escasamente una semana con este gestor y es demasiado pronto para cantar victoria pero mis sensaciones por el momento son muy, muy buenas.