Para quien quiera experimentar con ella lo primero que hay que hacer es bajarse la iso (cerca de 700 Megas). A partir de aquí tenemos dos opciones: quemar un CD con esta imagen o configurar una máquina virtual para usarla desde nuestro actual sistema. Si elegimos la primera opción tendremos como resultado un LiveCD que, una vez arrancado, nos permitirá usar todas sus herramientas. También tendremos la opción de instalarlo localmente y ni que decir tiene que si nuestro interés en ella no es meramente temporal es conveniente que lo hagamos para no perder las actualizaciones y personalizaciones que realicemos.
Para la segunda opción (crear una máquina virtual) y si vamos a usar vmplayer basta con que utilicemos la imagen que nos hemos bajado como uno de los CD’s en la definición de la máquina virtual que vamos a crear. Salvo que nos dediquemos a esto profesionalmente y/o podamos dedicar un portatil de forma exclusiva para ella creo que es la mejor opción. Para crear dicha definición podemos partir de una ya existente, usar EasyVMX o, para los más perezosos, bajarse este zip con la que yo he preparado. En este último caso basta con que desempaqueteis el contenido del zip en el mismo directorio donde os hayais bajado la imagen iso y que tengais en cuenta que el nombre de la misma debe de coincidir con el del parámetro ide1:1.fileName
del fichero backtrack.vmx
(en mi caso bt2final.iso
).
Si todo va bien Backtrack arranca y muestra el pantallazo de la imagen anterior en el que nos muestra las credenciales necesarias para hacer login como root de la máquina y algunos comandos útiles. Las herramientas que funcionan en modo texto (nmap, netdiscover, aircraft, etc.) están disponibles y listas para funcionar desde ya. Para otras tendremos que usar uno de los dos entornos gráficos disponibles: kde o fluxbox. Las herramientas, como podemos ver en este segundo detalle, están perfectamente clasificadas según su orientación:
Si hemos usado una máquina virtual para echarle un vistazo pero queremos gozar de las ventajas de una instalación local el siguiente paso es, lógicamente, instalarlo. La definición de la máquina que os he enlazado antes consta de un disco de 4 GB sin particionar, así que lo primero que tenemos que hacer es crear una partición para hacer la instalación. La distribución trae qtparted (aunque no aparece en ninguno de los menús) así que quien le tenga alergia a la línea de comandos no tiene excusas.
A continuación realizamos la instalación (kde -> system -> Backtrack installer) dónde sólo hay que indicar el cdrom de origen, el disco de destino y el tipo de instalación.
Una vez hecha la instalación reiniciamos la máquina para que arranque ya desde este disco duro tan virtual como nuestra máquina, pero antes de hacerlo y si hemos elegido la opción de instalación completa, podemos liberar el espacio de la imagen iso que ya no es necesaria borrando el archivo correspondiente y comentado o eliminando las líneas que lo referencian en el archivo .vmx:
# Settings for the optional virtual CDROM, ISO-image
#ide1:1.present = "TRUE"
#ide1:1.fileName = "bt2final.iso"
#ide1:1.deviceType = "cdrom-image"
#ide1:1.mode = "persistent"
#ide1:1.startConnected = "TRUE"
Y listo. Ahora queda la parte difícil: aprender a usar las herramientas y a saber elegir cual es la más adecuada según la ocasión. Pero esto es ya cosa vuestra. Suerte.