Este es el inquietante punto de partida de Spin, escrita por Robert Charles Wilson. Una novela de ciencia ficción compleja y bien construida que nos introduce en el relato a través de las vidas de sus tres protagonistas: Jason, un pequeño genio que juramenta su vida a estudiar el Spin, más interesado en saber qué es y cual es su finalidad que en encontrar una solución para la raza humana, Diane, su hermana gemela que busca refugio y consuelo en la religión y Tyler, amigo de la infancia de ambos hermanos y narrador en primera persona de la historia.
La novela mezcla características de la ci-fi dura de los años de la edad de plata (Heinlen, Pohl, etc.) con un tratamiento más cercano y, a ratos, sentimentaloide de los personajes que intervienen en ella, muy al estilo de los best-sellers actuales. Pero a pesar de esto último, se lee con interés y facilidad desde la primera página hasta la última y es uno de los libros de ciencia ficción que más he disfrutado en los últimos años.
Spin tiene una secuela, Axis, que aún no ha sido editada en castellano (y sobre la que el autor se queja en su blog de no haber tenido una buena acogida) y un desenlace, Vortex, que está a punto de publicarse en los EE.UU.